Los masajes relajantes están diseñados para liberar tensiones físicas y emocionales a través de maniobras suaves, rítmicas y envolventes. Esta terapia induce un estado profundo de relajación, mejora la circulación y reduce los niveles de estrés, devolviendo al cuerpo su equilibrio natural.
La duración mínima es de 60 minutos, y puede extenderse hasta 90 minutos según necesidad de cada paciente. Se recomienda iniciar los masajes lo antes posible, post procedimiento según indicaciones médicas. La frecuencia sugerida de sesiones es diaria y el número de sesiones dependerá del procedimiento realizado.
Se realiza en un ambiente controlado con aceites aromáticos naturales y maniobras lentas que abarcan espalda, cuello, hombros, brazos y piernas. Es ideal como tratamiento de mantenimiento semanal o como complemento a otros procedimientos estéticos.
Disminuye el estrés y la ansiedad. Mejora la calidad del sueño. Reduce dolores musculares leves. Estimula la circulación sanguínea y linfática. Aumenta la sensación de bienestar general. Ideal para personas con fatiga crónica, insomnio o tensión emocional.
Técnicas avanzadas que estimulan la regeneración celular para una piel más joven.
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